«Para que haya un mundo nuevo, debe haber relaciones nuevas». Son palabras de Pedro Casaldáliga que este martes por la noche se han recordado en la presentación de la Fundación que lleva su nombre. Un acto que ha reunido, sobre todo, gente de Brasil, de Cataluña y del resto del Estado, convocados para hacer memoria de este «profeta de la esperanza» el día del aniversario de su nacimiento.
Ha nacido así una entidad dedicada a velar por su legado y por la continuidad de sus causas. «Hasta ahora esta tarea había sido fácil porque Pedro nos guiaba en las acciones que teníamos que hacer; con su muerte nos ha dejado un gran vacío y también la responsabilidad de continuar todo este trabajo y las causas por las que luchar», ha explicado la presidenta de esta nueva entidad, Gloria Casaldáliga.
«Desde la Fundación compartimos la idea de que el lugar, el espacio de referencia en Cataluña y Europa del legado de Pedro debe ser Balsareny», apuntó. En la diócesis de Sao Félix do Araguaia la entidad trabajará para apoyar a la Asociación ANSA , creada por el obispo Pedro y la hermana Irene Franceschini, y que hoy trabaja para la recuperación ambiental de la zona, y que promueve la justicia y la paz, y atendiende las necesidades sociales de la región.
En cuanto al legado físico, la Fundación Pedro Casaldáliga velará por la musealización de la casa donde vivió Casaldáliga. También por su archivo, que cuenta con más de 250.000 documentos, muestra de «la lucha por la tierra, la causa indígena y la Teología de la liberación«. Otro espacio, el santuario de los mártires, donde fue asesinado el sacerdote João Bosco, y el mismo cementerio, a orillas del río Araguaia, donde fue enterrado el pasado mes de agosto el obispo Pedro.
La directora de Cataluña Religión, Laura Mor, que ha presentado el acto, dijo que este nacimiento es una muestra de que «Pedro ha generado mucha vida». Y como periodista ha subrayado la fuerza comunicativa del personaje, «la credibilidad por su coherencia» y «la capacidad de agitar conciencias». Casaldáliga fue autor de más de un centenar de libros, incluyendo poemas, cartas y artículos publicados en medios diversos. Entre su labor infatigable había también el trabajo de denuncia contra las estructuras que generan injusticias y exclusión.
Una pequeña muestra de su «sensibilidad poética» la han protagonizado varios niños y niñas que, desde el Mato Grosso, en Brasil, y desde Balsareny, en Cataluña, han recitado poemas de Casaldáliga. Unos en portugués, a la orilla del Araguaia. Los otros, en catalán, desde el Llobregat. «Con el río, símbolo de vida y de encuentro entre pueblos», explicaba Laura Mor en la presentación del recital. Mor ha destacado también la importancia de hacer llegar la memoria de Casaldáliga «a las nuevas generaciones». «No siempre se tiene que empezar todo de nuevo, sino que se necesitan ejemplos y modelos para los más jóvenes».
Como personalidad de referencia y que comparte la misma esperanza que Casaldáliga, en el acto ha agradecido también el papel del ex presidente de Justicia y Paz, Arcadi Oliveres, activista por la paz, que ha facilitado la labor de la Asociación Araguaia con el obispo Casaldáliga todos estos años y que estos días afronta el final de vida con serenidad y esperanza, tal como ha vivido, abierto a los otros.
Los promotores de la iniciativa han animado a colaborar con la Fundación: «Con esta esperanza e ilusión os invitamos a apoyar este sueño apoyando y participando todas las iniciativas que desde la Fundación llevamos a cabo».
Puede recuperar el acto íntegro en el enlace:
[Texto original de Laura Mor, para Cataluña Religión.]