En Brasil, los asesinatos por conflictos en el campo crecieron un 75% en 2021, un aumento que refleja «el abandono y acción deliberada contra la vida de las personas» del Gobierno del presidente Jair Bolsonaro. La denuncia ha sido hecha por la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT), vinculada al Episcopado brasileño, en la presentación de su informe anual, Cuaderno de Conflictos en el Campo 2021.
La Tierra Indígena Yanomami (TIY) ha sido uno de los territorios más duramente afectados por la violencia de los garimpeiros, buscadores de oro clandestinos, en Brasil. Reconocida en 1992, la TIY es la mayor de Brasil en extensión, con 9,6 millones de hectáreas (3 veces el tamaño de toda Cataluña). En ella viven los indígenas Yanomami y los Ye’kwana. También hay constancia de la presencia de ocho grupos de indígenas aislados en la selva, uno de ellos conocido como el pueblo indígena Moxihatëtëa. Desde 2012, la actividad clandestina de extracción minera está en expansión acelerada en el país y está teniendo un impacto significativo sobre la Amazonia.
Durante el 2020, el Centro de Documentación de la CPT – Don Tomás Balduino registró 9 muertes a consecuencia de conflictos del campo, la mayor parte dentro del estado de Amazonas (6). En 2021 fueron registradas 109 muertes a consecuencia de conflictos, lo que significa aumento de 1.110%.
Del total, 101 muertes fueron registradas dentro del estado de Roraima. Todas indígenas Yanomamis. Todas causadas por acciones de buscadores de oro clandestinos. Desde 2020, la Asociación Hutukara alerta a las autoridades de los riesgos de la escalada de violencia en las regiones de la TIY donde la extracción minera ilegal, el garimpo, ha avanzado más. Según datos obtenidos por el Sistema de Vigilancia de la Minería Ilegal dentro de la TIY, el cauce del río Uraricoera es la región más afectada por esta actividad, concentrando un 45% de toda el área degradada por la minería ilegal dentro del territorio indígena yanomani.
Violencia contra las personas: aumento del 75% en los asesinatos
En 2021, datos de la Comissión Pastoral de la Tierra evidencian que la violencia contra personas fue brutal. Sólo en los estados que conforman la Amazonia Legal se registraron 28 asesinatos, el 80% del total en todo Brasil. La actuación de “pistoleros por encargo” y de las llamadas “agromilicias”, así como de agentes públicos, ocasionó 35 asesinatos por conflictos en el campo en Brasil, durante el año 2021. De este total, 33 eran hombres y dos eran mujeres.
Durante este período hubo todavía 27 tentativas de asesinato y 132 amenazas de muerte. También fueron registradas 75 agresiones físicas con varios heridos, inúmeras intimidaciones y humillantes intentos de subyugación, con 13 registros de tortura practicadas principalmente por agentes privados de grandes propiedades, terratenientes, fazendeiros.
En total, 100 campesinos fueron presos en 2021, con aumento de 45% de prisiones respecto al año anterior.
Cinco persones LGBTI+ son victimas de violencia en el campo
Los datos de violencia contra las personas, divulgadas en la publicación Conflictos en el Campo Brasil 2021, presentan, por primera vez, informaciones sobre la orientación sexual y la expresión de género de las víctimas de la violencia en el campo. En 2021, cinco personas LGBTI+ del campo fueron víctimas de violencia, conforme consta en los datos publicados en el informe. Dichas violencias son: humillación y prisión; asesinato; intimidación y tortura.
Trabajo esclavo: mayor número de rescatados des del 2013
En 2021, la fiscalía del trabajo brasileña rescató de la situación de esclavitud a 1.726 personas, el mayor número desde 2013. Un aumento de 113% en relación a la cifra de 2020. Fueron 169 casos de trabajo esclavo en ambiente rural el 2021, aumento de 76% en relación al año anterior. Siendo el estado de Minas Gerais el que lidera la lista, con 51 casos y 757 personas rescatadas. Enseguida viene el estado del Pará, con 27 casos, y el de Goiás con 17.
Del total de rescatados de esta práctica criminal, 64 eran niños y adolescentes, lo que corresponde a un aumento del 121% respecto al año anterior. Las regiones Sudeste y Centro-Oeste concentraron el mayor número de menores de edad esclavizados, 19 cada una.
Estas dos regiones es donde se detectaron también más casos de trabajo esclavo: en la región Sudeste fueron registrados 59 casos y 919 rescatados, mientras que en el Centro-Oeste fueron 37 casos y 415 rescatados en 2021.
Aumentan los intentos de destrucción de las condiciones de existencia de los pueblos del campo
Durante el 2021 hubo 2.143 familias desalojadas judicialmente, más del 12% respecto al año 2020. Del mismo modo hubo un aumento del 18% de la cantidad de familias expulsadas violentamente de sus tierras. El número pasó de 469, en 2020, a 555, en 2021.
Más de 71 millones de hectáreas estuvieron o todavía están en conflicto. Las tierras indígenas constituyen la mayoría abrumadora de estas tierras que sufren intrusiones con violencia y agresivos saqueos, correspondiendo al 81% de las áreas en situación de tensión social y conflicto. Los llamados sin-tierra constituyen la segunda categoría de identidad con más áreas bajo cruenta presión y conflicto, seguidos por los “posseiros”.
Por lo que respecta a los datos sobre el número de familias implicadas en conflictos por tierra en los últimos diez años, salta a la vista el espectacular aumento de la cantidad de familias que han tenido sus tierras invadidas desde el inicio del actual gobierno (2019-2021): nada menos que 206% más en relación al 2018.
En la Amazonia se han registrado el 64,5% de las amenazas de expulsión, el 63% de las contaminaciones por agrotóxicos, el 78% de la deforestación ilegal, el 87% de las expulsiones, el 81% de las grillagens (acaparamiento ilegal de tierras), el 82% de las invasiones, el 69% de los registros de sicarios y pistoleros, el 73% de las omisiones/connivencias del Estado y el 70% de violaciones de las condiciones de existencia.
Resistencia
Las acciones de ocupación y recuperación de tierras tuvieron también un aumento expresivo en 2021. En total, estas acciones de resistencia pasaron de 29 a 2020, a 50 a lo largo de 2021, un aumento de 72%, y de 1.391 familias al 2020, hasta 4.761 familias que ocuparon y recuperaron tierras en 2021. Un aumento de 242%.
Datos del infome anual de la Comisión Pastoral de la Tierra.