¿Quién soy yo? ¿Cuál es mi historia?

Vivimos una época de enfrentamientos políticos, de violencia y de egoísmo. Un tiempo de destrucción ambiental. Muchos falsos profetas mienten para intentar obtener votos o hacernos ser su negocio. ¡Un tiempo que requiere atención! ¡y reflexión! Pero, con tanta «palabrería» y tanta mentira, ¿cómo orientarse? ¿cómo saber?.

Las tres preguntas fundamentales

Tratamos de responder a estas tres preguntas:

1. ¿Quién soy yo?

2. ¿Cuál es mi historia?

3. ¿Qué valor tiene esta tierra?

y mirad,

¿Quién soy yo?

1. Si yo no soy sólo yo y me preocupo por la juventud, por los ancianos, por las mujeres, por mi pueblo. Si yo no soy sólo yo, sino que soy comunidad porque vivo junto a otros/as y es conjuntamente como quiero ser feliz. Si yo no soy sólo yo y prefiero llegar a la meta con los demás que solo, aunque caminemos más lentamente juntos. Si yo no soy sólo yo, porque cuidar de otros es tan importante como cuidar de mí mismo y busco unión y no división. Entonces, yo no soy sólo yo; yo soy nosotros.

2. ¿Cuál es mi historia?

Si mi historia, no es sólo la mía, sino la de todos los que vinieron antes de mí y de todos los que estaban aquí antes que yo: migrantes que buscaban un lugar huyendo de la miseria y de la explotación; pueblos que viendo su tierra invadida o saqueada, dieron la vida por defender y preservar su territorio. Si mi historia es una historia de trabajo y de lucha compartida. Entonces, mi historia, no es sólo la historia de mi vida, es la de nuestra existencia.

3. ¿Qué valor tiene esta tierra?

Si el valor de esta tierra va más allá del dinero, porque el olor de la tierra húmeda, los saltos de los animales y las risas de las aguas limpias me sacan de la soledad y me provocan alegrías libres.

Si el valor de esta tierra no es el de mercado, porque que el sonido de sus bosques y las aguas y sus profundos silencios valen más que cualquier cosa que pueda comprar o vender.

Si el valor de esta tierra no es el de la producción ilimitada porque siento la pulsión de las frutas sin fertilizantes, el olor del aire limpio y transparente al amanecer, la satisfacción de ver los campos sanos, sin veneno; la vida del bosque firme.

Entonces, no tengas duda, YO SOY NOSOTROS y NOSOTROS SOMOS TIERRA.

Texto escrito por Lola Campos Rebollar, Operação Amazônia Nativa. 2018.